Aquí tenéis la crónica de la Media Maratón de Londres, disputada como sabéis el pasado domingo día 28 por Javi Maestre. Disfrutad con las aventuras de nuestro particular don Quijote pocero:
"Pues nada, imprevistos por todos lados, con 2 horas de antelación por mi
reloj una vez cambiada la hora el dia anterior, me dirigía a Londres. Mi
primer contratiempo la espera del bus que fue más de lo normal, una vez
en la estación cogí el primer tren a Londres, sin saber que me había
subido en el más lento de mi vida y el cual paraba unas 15 veces, lo
nunca visto en mis visitas a Londres.
En este camino me dio por mirar la hora en las estaciones que paraba y veía que todas daban una hora diferente a la mía. Yo confiaba en que el error fuera de esas paradas y no mío. Inocente de mí. Una vez en Londres tendría que coger el metro hasta el evento. Serían las 8:45 por mi reloj, pero pregunté a dos empleados para que me dijeran la hora exacta, los cuales me confirmaron mis peores pronósticos. Ahora mi duda seria si volverme a casa o apresurarme e ir a la carrera a ciegas sin saber lo que me encontraría en el recinto donde se habían dado cita 20.000 corredores que ya estarían rodando.
En este camino me dio por mirar la hora en las estaciones que paraba y veía que todas daban una hora diferente a la mía. Yo confiaba en que el error fuera de esas paradas y no mío. Inocente de mí. Una vez en Londres tendría que coger el metro hasta el evento. Serían las 8:45 por mi reloj, pero pregunté a dos empleados para que me dijeran la hora exacta, los cuales me confirmaron mis peores pronósticos. Ahora mi duda seria si volverme a casa o apresurarme e ir a la carrera a ciegas sin saber lo que me encontraría en el recinto donde se habían dado cita 20.000 corredores que ya estarían rodando.
20 minutos de metro con mi parada en North Greenwich,
recinto del evento, allí que me presenté con mi mochila y complementos a
cuestas y con un agotamiento extra de la impotencia y carreras por las
escaleras mecánicas del metro.
Mi primer instinto me guió a la búsqueda
de algún colaborador, el cual me señalaría la salida. Estamos hablando
de una hora aproximada, las10:05. Ya mi vista estaba puesta en los
corredores que podía ver separados por vayas, había muchísimos que no
habían cruzado la línea de salida aún. Era imposible ir al recinto de
guardarropa que se encontraba en el otro extremo y dejar todo allí, por
lo que pedí a una colaboradora la cual en un primer momento se negó a
que guardara mi ropa y me diera paso dentro del vallado. Una vez
convencida con mis encantos, recogió mi mochila y ropa que más tarde
llevaría a la zona adecuada, no sin antes abrir la valla para darme paso
a la cola de la carrera. Todavía estoy agradeciéndole su gesto.
Gracias.
Finalmente, lo había conseguido, ya no me importaba mi
marca ni nada, sólo que estaba dentro del grueso de corredores y pasando
por la zona de chips de salida :)
Se me presentaba una carrera
extraña en la cola de unas 20000 personas, donde podía observar
diversidad de gente parando para hacer cola en servicios portátiles,
gente que andaba para volver a correr, gente vomitando, gente con
zapatillas no adecuadas para una carrera de esas características, lo que
uno no suele ver en otras posiciones de carrera.
Después de esto sólo
decir que ha sido una de las medias maratones en las que he transitado
más por el acerado que por el propio asfalto. No hubo nadie que me
diera relevo y nadie que me marcara un ritmo. ¿Cuántos corredores
dejaría en mi camino a meta, a la cual llegaría 1h y 41m después?
Teniendo en cuenta que mi puesto en la clasificación fue el 1349 de un total de 20.000... Muchos, lo cual mi esfuerzo me costó.
Una vez cruzada la línea de meta y
recogida mi medalla conmemorativa de la prueba junto a mi mochila, sólo
quedaba desplazarse unas paradas en metro y hacerse una fotico junto al
Big Ben con el chándal del adorado Club El Pozo y en ausencia de otras
banderas poceras, nada como nuestra patriótica bandera española".
Apoteósico. We love you.
Enhorabuena CAMPEÓN!
ResponderEliminarEres un ejemplo a seguir por todas las personas que amamos este deporte, por tu costancia y esfuerzo en practica del atletismo.
Eso sí, no podemos admirarte por tu puntualidad, a los hechos me remito, jejeje. Un abrazo.